El Miércoles Santo es uno de los días más esperados del año, porque, entre otras cosas, toda la vida de la ciudad está pendiente de la procesión de la Real, Muy Ilustre, Venerable y Antiquísima Archicofradía de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, procesión que el pueblo murciano bautizó con el cariñoso nombre de "los coloraos".
Partida desde el Convento de Las Agustinas
A las doce del mediodía, desde el convento de clausura de las MM Agustinas, se traslada la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Titular de la cofradía, que rinde culto a su advocación y que popularmente se la conoce como la de "los moraos" por el color de sus túnicas.
Esta venerada imagen, que ha permanecido en la clausura conventual desde el último viernes de Cuaresma, regresa a la primitiva iglesia de la cofradía discurriendo por las calles del viejo barrio de San Andrés. Sus mayordomos-estantes visten, esta mañana, la túnica penitencial, al igual que lo harán en Viernes Santo y también, como en ese día, caminan descalzos.
Sede: Iglesia Parroquial de Nuestra Señora del Carmen
Hora de salida: 19,00 horas
Hora de encierro: 00,00 horas
Fruto de las predicaciones de San Vicente Ferrer y el culto a la Preciosísima Sangre de Cristo nació en Murcia esta entidad nazarena, que pasa, con creces, los cinco siglos de existencia.
Varios son los aspectos que llamarán nuestra atención al presenciar el popular cortejo de "los coloraos". En primer lugar, la gran participación de nazarenos, que supera los tres mil. También la gran cantidad de niños que, delante del estandarte mayor, van en la cabeza del cortejo. Son varios centenares los que visten la túnica bermeja y procesionan delante de los mayores. Se caracteriza por la entrega de caramelos y obsequios, así como también habas tiernas de los bancales huertanos. La presencia en el cortejo procesional de varias secciones de "carros bocina y timbales" que acompañan con sus músicas destempladas a algunos pasos de la archicofradía. La numerosa presidencia de la procesión, con la presencia de todos los alcaldes pedáneos de la huerta de Murcia, reconociendo públicamente la vinculación de los huertanos a esta popular archicofradía. Destaca la luz de cera en todos los pasos y el extraordinario adorno floral del paso de La Dolorosa.
Itinerario
Nuestra Señora del Carmen (19.00 horas), Alameda de Colón, Plaza Camachos, Avda. Canalejas (19.30 horas), Puente Viejo, Plaza Martínez Tornel, Tomás Maestre, Glorieta de España, Arenal, Plaza Belluga (22.00 horas), Apóstoles, Isidoro de la Cierva, Plaza Cetina (20.30 horas), Barrionuevo, Plaza Hernández Amores, Trapería (21.00 horas), Plaza de Santo Domingo (rodeándola), Calle Basabé (21.30 horas), Calle Echegaray, Plaza del Romea, Fernández Ardavín, Calderón de la Barca, Plaza Esteve Mora (22.00 horas), Plaza San Bartolomé, Santa Catalina, Plaza de las Flores (lado izquierdo), Plaza San Pedro (22.30 horas), Jara Carrillo, Plaza Martínez Tornel, Puente Viejo, Avda de Canalejas (23.00 horas), Plaza Camachos, Alameda Colón, Nuestra Señora del Carmen (23.30 horas).
Otros aspectos del Desfile
La procesión es digna de ser contemplada a lo largo de todo el recorrido, pues cualquier rincón es el apropiado para ser vista. Si bien destacaríamos como emplazamientos el Puente Viejo o el Jardín de Floridablanca, bien a la entrada o ya de madrugada en la recogida.
La estampa del cortejo de los "los coloraos" cruzando el Puente Viejo es única e inigualable en la Semana Santa murciana. Esta archicofradía invierte más de seis horas en realizar su recorrido por la ciudad, dándose la circunstancia de que cuando está terminando de salir a la calle, la cabeza del cortejo ya se encuentra en los aledaños de la iglesia del Carmen para empezar a recogerse.
La ciudad en Miércoles Santo queda literalmente abrazada e inundada por el desbordante discurrir de los archicofrades de la Sangre.