Aperos agrícolas tradicionales
Las familias del campo murciano empleaban diversos aperos, más o menos rústicos, para llevar a cabo las faenas que debían realizar en el campo a lo largo del año agrícola. Trillos, hoces, picos, arados, azadones, palas, horcas y ganchos, eran algunas de las herramientas más utilizadas por estos incansables agricultores murcianos. Las faenas comunes a todos los cultivos eran las que se debían realizar con arado.
Ciclos del año agrícola en los cultivos de secano
Primer ciclo del año. 'La siembra'.
La siembra se realizaba a mediados de septiembre. El labrador esparcía la semilla, para lo que se servía de la 'sembraera', que era un cesto rectangular apropiado, con hombrera y asa para la mano izquierda. Otras modalidades de siembra se utilizaban para el maíz, los pésoles, garbanzos, alubias, guijas, etc..., que se sembraban tras el arado, a golpe de azadón, al igual que se hacía con hortalizas, patatas, melones, calabazas y nabos, que solían cultivar como complemento a su verdadera especialidad: trigo, cebada, centeno y avena.
Segundo ciclo. 'La barbechera'
Se realizaba en primavera y era el más largo y tranquilo de los cuatro ciclos en que se dividía el año agrícola. Sin embargo, en este período de descanso de la tierra, los agricultores no dejaban de trabajar las tierras con sus azadones, arados y vertederas, con el fin de prepararlas para seguir la cadena agraria de producción que les correspondiese. Sólo se salvaba de ser labrada la parcela que el pastor necesitaba para sus ovejas.
Tercer ciclo. 'La siega'
Las familias del campo murciano debían contratar a cuadrillas de segadores para acometer el duro trabajo que suponía en junio la siega. Cada uno apechugaba con su cometido: unos segando, otros atando y apilando, otros trayendo agua, comida, ramales, etc...
Cuarto ciclo. 'La acarrea y la trilla'
Julio y Agosto son los meses que culminan la recogida de la cosecha a la era para la trilla. Empezaba por la 'acarrea', que consistía en ir recogiendo por rastrojo, toda la mies segada y atada, cargarla en carros preparados para este menester, traerla a la era y hacinarla por variedad y clases. Tras esto se acometía la trilla a través de trillos enganchados en las caballerías.